domingo, 11 de diciembre de 2011

Azteca Rex (Tyrannosaurus Azteca, o Aztec Rex)


De lo mejor de la película: el cartel

Azteca Rex viene siendo la clara muestra de cómo hacer una auténtica bazzzura partiendo de una idea que podría haber llegado incluso a ser una mierda. Los españoles, Hernán Cortés incluido,  llegan a México y se encuentran con una tribu que adora a un Tiranosaurio Rex, que tenían más o menos de mascota, como el que tiene un perro y lo deja suelto por el pueblo. Al animalico le ofrecen corazones humanos en plan ritual super siniestro, y eso hace que se le pase la gusa y no empiece a comerse lugareños a diestro y siniestro. Pero supuestamente, al llegar los españoles el animal se encabrona, se ve que se le altera el apetito, los indios les culpan a ellos, y empiezan a pasar cosas. Para que los indios les perdonen, deciden matar a los animales (hay dos), y básicamente va de eso la película. Pero no pasa nada. Es tan soporífera que deberían ponerla algún día en la dos después de comer. Por favor, ¡qué pesadilla!, hay un indio que está encabronado con los españoles porque uno muy chulapo le roba la novia, y no para de hablar de tradición y de mierdas; un monje que había naufragado con su expedición por la zona y había enseñado a hablar a los indios español, que no para de beber el jodio; un altar de sacrificios que entre sus materiales de construcción cuenta con el cemento azteca (¿?) y el cartónpiedra; un feje indio que debía venir de familia alemana, porque lleva pintada su bandera por todo el cuerpo; conversaciones eternísimas que se podrían solucionar con dos palabras, pero no, ellos erre que erre a hablar, los cansinos. Las maneras de matar que tiene el Tiranosaurio… en fin, lamentables, destacando la vez que troncha a una tipeja con un árbol. Por no mencionar los desajustes históricos, hablando en metros, mentando a Italia, e incluso a España… unos efectos especiales hechos por alguien muy especial, sin duda alguna, porque mira que son malos. Nada, nada, aburridísima, lenta como su p*** madre, parando la acción cada dos por tres con conversaciones innecesarias, me has defraudado Azteca Rex, tu título molaba. Lo único bueno, es el final, que desvela el origen, hasta ahora desconocido, de la sangría (olé).

Lo mejor (aparte de lo de la sangría): el momento en que la india hija del indio con descendencia alemana y el español echa’o pa´lante protagonista, son casados en medio de la selva por el monje borrachin. Esto ya está bien, pero mejora la cosa cuando se van a cosa de dos metros de donde está el monje, con el Tiranosaurio vagando por ahí, a copular. Y al consumar el matrimonio, se van los tres juntos como si no hubiera pasado nada.
Lo peor: probablemente la existencia de este film, pero para no darle tanta importancia a una bazzzura de tales dimensiones, lo dejaremos en que lo peor es que mañana es lunes.

Nota: ni un 3 te mereces, sucia escoria.

Fdo: Vincenzo Lametto

Momento de la merienda del Tiranosaurio, compuesta por una tierna muchacha, y la rama de un arbol

Trailer

2 comentarios:

  1. No deja de resultar agradable entrar en el blog y ver una crítica tan acertada a un film de esta calidad.
    Os habéis acaso olvidado de aquel que en el trailer se anuncia como "el guerrero", un afamado actor conocido por el público por sus papeles en telefilms y seriales de indudable calidad como Walker Texas Ranger, seaQuest o CSI New York. No sería justo citar su nombre, Marco Sanchez.
    Como ya he dicho, estoy plenamente de acuerdo, si se busca poder echar cabezaditas sin llegar nunca a conciliar el sueño, esta es la película.

    Att.

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  2. Plenamente de acuerdo. Excepto en una cosa. Tomas como un fallo histórico que se miente a España. Deberías leer la crónica de la conquista de Méjico que de ella hizo Bernal Díaz del Castillo, uno de sus soldados. O las mismas cartas de la Conquista de Méjico, de Hernán Cortés. Un saludo.

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